ESPACIOS DE AUTO APRENDIZAJE PARA DISMINUIR LA BRECHA DIGITAL Y FORTALECER LAS COMUNIDADES

• Continúan las grandes preguntas y el fortalecimiento de las comunidades WLH
• Junto a SOLE Colombia, el Programa Hilando Vidas y Esperanza (WLH) busca fortalecer habilidades tecnológicas, además de incentivar un pensamiento creativo y crítico en las comunidades.
• Con la donación de computadores a las 15 comunidades focalizadas se pretende reducir la brecha digital y fortalecer los espacios SOLE.

Desde el Programa Hilando Vidas y Esperanza (WLH), de la Agencia de los Estados Unidos para el Desarrollo Internacional (USAID), implementado por la Organización Internacional para las Migraciones (OIM), continuamos fortaleciendo los espacios de auto aprendizaje SOLE; esta vez, con la donación de 26 computadores a las 15 comunidades focalizadas.  

Estos espacios de auto aprendizaje consisten en que a partir de la formulación de preguntas como: ¿Por qué los animales no hablan? ¿Cómo le entra el agua al coco? ¿Por qué la luna afecta la naturaleza? Y el intento por resolverlas, se fortalezcan las habilidades creativas, de investigación y tecnológicas de los participantes.  

En un SOLE, se reúnen niños y niñas, jóvenes y adultos alrededor de un computador y logran investigar la respuesta a la pregunta que entre todos han elegido. Después, se conectan de manera remota con una persona en el extranjero, denominada como “abuelita”, para contarle y socializar lo qué han encontrado. 

A lo largo del año, se han instalado y acompañado 32 encuentros SOLE, en los que han participado alrededor de 400 personas de las comunidades focalizadas. Además de los encuentros, 74 personas se han formado como Embajadores SOLE, para trabajar de la mano con Instituciones educativas y las Juntas de Acción Comunal de cada corregimiento y continuar replicando estos espacios. 

Este es el caso de Orcelis, Embajadora de la comunidad de San Pedro Consolado en San Juan Nepomuceno, Bolívar, quien pensaba que no sabía nada de tecnología y que partir de este proyecto y del primer SOLE que ella misma organizó, mencionó: “me motiva participar de este Programa porque unos de los sueños que he tenido en mi proyecto de vida desde que estaba en octavo de bachillerato fue estudiar tecnología. Y hoy fue dar un paso hacia ese sueño”. 

En los próximos meses, el Programa WLH, junto a la Fundación SOLE Colombia, continuará acompañando y motivando a los embajadores de cada región para que los SOLE continúen y lleguen a más personas. Además de continuar con la entrega de computadores para lograr comunidades más equitativas y conectadas.  

Este contenido fue publicado originalmente en www.colombia.iom.int