Más sobrevivientes del conflicto mejoran sus conocimientos en Comunicación Noviolenta

“En la comunicación sincera encontramos el puente para entender la tierra y sus misterios latentes. La buena comunicación un arte en sí, un puente que conecta corazones aquí”. 

Este es un fragmento de un poema escrito por Cindy, una joven oriunda de los Montes de María y participante del proyecto de Comunicación Noviolenta (CNV), desarrollado en el marco del Programa Hilando Vidas y Esperanza (WLH) de la Agencia de Estados Unidos para el Desarrollo Internacional (USAID), implementado por la Organización Internacional para las Migraciones (OIM).

Cindy y otras 65 personas de Bolívar, Sucre, Antioquia, Valle y Cauca, participaron en las escuelas de formación en CNV desarrolladas en alianza con la organización Resuena Colombia. Con una intensidad horaria de 100 horas, el curso permitió fortalecer la capacidad de los participantes para identificar las necesidades humanas, nombrar los sentimientos con un vocabulario que facilite la conexión con los demás y permita abordar de forma pacífica los conflictos; y establecer relaciones basadas en la empatía. 

Como parte del proceso formativo, los asistentes recibieron kits con un manual y material didáctico sobre las técnicas y herramientas en CNV, que les permitirá aplicar esta práctica en su vida personal, familiar y comunitaria, y enseñar a otros cómo hacerlo. En el marco del proceso de aprendizaje, los participantes crearon en grupo planes de acción municipales para transmitirle a sus comunidades lo aprendido. Por ejemplo, los sembradores de comunicación noviolenta formados en 2023 ya han realizado sensibilizaciones de esta metodología con profesionales de la salud en el Centro de Salud de Piendamó, Cauca y con personas privadas de la libertad en el municipio de Anori, Antioquia.

En las escuelas, que terminaron en el mes de septiembre, también participaron ocho trabajadores de la salud de algunos de los hospitales aliados del Programa WLH, quienes también generaron planes de acción para transmitir estos conocimientos entre sus colegas y pacientes. 

Estos 66 nuevos participantes se suman a los 75 que recibieron esta misma capacitación en CNV por parte de Resuena en 2022, también en el marco de esta alianza con el Programa WLH. De ellos, 53 ya forman parte de la Red Nacional de Sembradores de CNV y han desarrollado más de 30 talleres de réplica y sensibilización (ver fotos) sobre este tema en sus territorios logrando impactar cientos de personas como padres y madres de familia, docentes y estudiantes de instituciones educativas rurales, miembros de juntas de acción comunal y diversos grupos poblacionales.

El proceso pedagógico se basa en el modelo desarrollado por el psicólogo estadounidense Marshall B. Rosenberg y el Centro para la Comunicación Noviolenta. WLH incorporó esta metodología en su intervención considerando que la resolución pacífica de conflictos es fundamental para la construcción de paz en Colombia; y por eso, junto a Resuena trabaja para llevar estos conocimientos a personas que han sobrevivido el conflicto armado y la violencia. Ellos, que han resistido pacíficamente la violencia de la que fueron víctimas, ahora cuentan con más herramientas para seguir promoviendo una cultura de paz en sus territorios. Contribuir a mejorar el acceso a salud mental, las estrategias comunitarias de resiliencia y la calidad de vida de estas regiones, hace parte de los objetivos del Programa Hilando Vidas y Esperanza. 

Este contenido fue publicado originalmente en www.colombia.iom.int